viernes, 28 de julio de 2023

TOZAL DEL MALLO. VIA RAVIER

Tozal del Mallo. Via Ravier. 01/07/23

 

La vía Ravier es la primera vía que se abrió en el "Retablo" como antiguamente llamaban al Tozal del Mallo. Su presencia no pasa desapercibida para nadie que suba a la Pradera de Ordesa, ya que es la primera pared de forma individual que uno se encuentra, aunque forma parte de la pared principal que empieza en la Muralla de Mondarruego.

Aunque para muchos escaladores es la "facil" de Ordesa, para nosotros la vía Ravier es casi el culmen de nuestra escalada. Solo el hecho de plantearnos escalarla y afrontar el reto físico y psicológico, ya era todo un desafío.

Después de tomar el bautismo el año pasado en la Anglada-Cerda, volvía a Ordesa, a la que debía haber sido la primera escalada en esta zona, pero por múltiples motivos no pude hacerla antes. Para mí, la escalada en Ordesa era el sueño que creía que no se cumpliría, pero con paciencia y dedicación llego el día en que pude pasar por allí, no sin sufrimiento y con todos los ingredientes que tiene escalar en Ordesa, donde el V del croquis tienes que ganártelo a cada paso, ir leyendo bien los pasos, visualizando los pies que puedas tener, para no tirar en exceso de brazos... como leí en un articulo de Adriano Cofredes "Pincho", escalar en Ordesa tiene el código AAC: Atlético, Aéreo y Comprometido.

Con estos antecedentes, nos fuimos de viaje el viernes, llegamos a un área recreativa cerca de Torla, cenamos y echamos los sacos. 

Vida gitana de la primera noche.

Dormí poco, entre ruidos de coches, incomodidad propia del vivac y el escaso tiempo de sueño… a las 5:00 sonó el despertador y como dijo Piña después “parecía que nos habíamos tirado de un avión”, ya que fue vestirnos deprisa y salir hacia Torla, para coger el billete del primer bus que salía a las 6:00. Aparcamos en el parking gratuito y aún no estaba abierta la caseta donde vendían los tickets, pero ya había escaladores y demás gente, haciendo cola para el bus. Además había un trasiego inaudito para esas horas, debido a que había una carrera de trail, como más tarde comprobamos.

Nos montamos al bus, al final sobraban más de la mitad de las plazas y subíamos escaladores, unas 10-12 cordadas, un grupo de “runners”, como se dice ahora, y algún senderista aplicado. Como anécdota, cuando ya estábamos montados, subió al bus Cristian Ravier, hijo de Jean Ravier, uno de los aperturistas de la vía y gran escalador. Se sentó al lado de Piña y comenté con Nacho, que era como un buen presagio, vamos a hacer la vía Ravier y aparece Cristian Ravier. Los demás escaladores parecían gente recia… no es para menos el sitio lo requiere… como dijo Piña… "aquí te haces pequeño, por las paredes gigantescas que tienes delante y por los grandes escaladores que van en ese bus".

Al bajarnos del bus, en dos minutos no quedaba nadie, salieron casi corriendo. Nosotros a nuestro ritmo, algo lento pero intentando disfrutar cada momento.

Cargamos con las mochilas y al levantar la vista y contemplar las enormes paredes que nos rodeaban: El libro abierto, La Fraucata, el Tozal del Mallo, Mondarruego… la autoestima y el ego sufrieron una gran bofetada de realidad. Miedos y nervios se mezclaban entre expectación e incertudimbre… ¿como sería la vía? ¿seriamos capaces de salir por arriba?. 

 

Por muy fuerte y convencido que vayas, las dudas siempre aparecen al empezar a caminar. Así callados, cada uno identificando sus pensamientos, alejando esos molestos fantasmas, íbamos subiendo acompañados de aquellos hayas enraizados en las laderas.

 

El Tozal intimidaba entre los arboles de vez en cuando

Salimos del bosque, y al poco de pasar el cruce hacia la Faja Racon y pasar una pequeña chorrera, abandonamos el camino en una característica curva. Atravesamos unas pendientes de hierba siempre inestables y desagradables de transitar, que te dejan ese punto de nerviosismo, para ir sumando ingredientes a la actividad que estábamos a punto de comenzar. Nos vestimos con arnés y ferretería variada, comimos algo y estábamos ready para la batalla. El último tramo hasta el pie de vía era algo tedioso, transitamos entre pedreras, pendientes de hierba y arbustos hasta llegar al punto donde más o menos identificamos el pie de vía. Desplegamos cuerdas y empezamos.

 

Vía Ravier. 390 m. 6b+ (V+ obligado)

(Pondré el grado del croquis de Luichy, excepto la chimenea que en libre saldrá mucho más dura)

Abierta el 20 y 21 de mayo de 1957 por N.Blotti, C.Dufourmantelle, C. Jacoux, M.Kahn y Jean Ravier, del cual adquirió el nombre la vía.

Material: Llevamos 15 cintas (se usan bastante por clavos y ptes de roca), juego de friends y repetimos los intermedios.

Aproximación: aprox 1h30’ desde Pradera.

croquis de Luichy con anotaciones propias
croquis de Luichy con anotaciones

 

L1. IV. Aprox 30m.

 

Empezamos por un canal muy herboso donde la dificultad venía dada por evitar pincharte con los arbustos que lo poblaban. Pisar en la roca era un ejercicio propuesto por un entrenador masoca de rocodromo, donde la idea era acertar en las presas lo más limpias posibles. Muy guarrero y feo. Quizás se podía subir por otro canal a la izda, con algún arbolillo que parecía igual de sucio, para llegar al colladito del contrafuerte, donde una vez allí, había un pasito para subir a una pequeña repisa con varios cordinos con maillón.

Desde aquí divise lo que sería la continuación hasta la propia pared y decidí montar reu en estos cordinos, ya que sino el rozamiento de la cuerda sería como arrastrar un barco.

 

L2. IV. Aprox 35m.

 

Se veía evidente donde teníamos que llegar pero no por donde, pasaba lo mismo que en el primer largo, tenía mucho erizón (arbusto de flor amarilla que pincha) y había que sortearlo de la mejor manera hasta que llegabas a un murete donde se podía proteger. Este era fácil, y se continuaba por otro jardín de pinchazos y raspaduras varias hasta la pared, donde estaba la reu con dos bolts, muy cómoda, para tomarte unas birras.

 

L3. IV+ Aprox 50 m.

 

Aquí dudamos si salir más en la vertical o coger un canal herboso algo a la izda. Al final acertamos con la vía saliendo hacía este canal, aunque seguía teniendo bastante vegetación, más hierba y menos arbustos, se dejaba escalar. Según croquis había un clavo al poco de empezar pero Nacho no lo vio, así que protegiendo al gusto fue ganando metros, atravesando un paso donde había que empotrarse… algo raro, que te ponía en situación de donde estábamos… ¡¡Ordesa señores!! Llego a una terracita donde hay unos arbolitos y confirmo que iba bien porque aparte de dos bolts de rescate (inscrito SOS en la chapa), había otro cordino que también marcaba el croquis como una reu opcional. Como ya habíamos perdido algo de tiempo en los 2 primeros largos matojeros, Nacho siguió entre pasos que ya se escalaba sin evitar pisar "lechugas ni pimientos", hasta la reu oficial con 2 clavos.

 

En este largo ya fui cogiendo algo de ritmo y recordando como era la escalada en Ordesa… ir buscando siempre pies porque sino te das pasos más duros de lo que son. Aún así ya veíamos que el grado era durete para ser un IV+.

En la R3
 

L4. V. Aprox 30m

Empezando el L4 y protegiendo



 

Largo muy bonito que me toco de primero. La escalada ya era bastante vertical, típica de Ordesa. Empezaba con salida algo apretada a derechas, donde protegí con un friend pequeño y por ello me pete un poco sin necesidad… los nervios del directo.

Un poquito más arriba del largo

Un par de pasos con buenos pies y se llegaba a un cordino a la derecha. Una vez chapado, se pasaba un pelín a izda a encarar un diedro tumbado, que se protegía bien, pero donde había que empezar a escalar fino. 

Fue saliendo bien y fui cogiendo confianza. Después del diedro, había que salir algo más a izda para evitar el techo que se tenía justo encima. Una vez allí, encarabas un murete con dos clavos. En este tramo disfrute bastante y me pareció muy bonito de escalar. Divise desde abajo un pequeño saliente de roca en la vertical del segundo clavo, que había visto en algún video de Internet. Después de coger ese saliente, unos pasos en travesía a la derecha muy bonitos, pero con ya con buen patio que te dejaban en una repisa cómoda donde estaba la reu con 2 clavos y una chapa.

El grado me pareció un pelín más que el dice el croquis, pero con los clavos, puentes de roca y friends se protegía muy bien. En resumen… gran largo de “ir escalando”.

 

L5. 6b+(V+/A1) Aprox 30 m

 

Largo de la chimenea famosa resbalosa y visible desde la base de la pared, que hace reconocible la vía. Se lo dio Piña de primero y no se aburrio. El inicio del largo es vertical, tienes 2 clavos pero que se debe ir completando con algún friend, te lleva un pelín a izda y la transición hasta debajo de la chimenea es “curiosa”. Todos creíamos que la chimenea sería un paseo en A1 con los pedales, pero nada más lejos de la realidad. Para llegar a los clavos donde poder ir con los estribos, había un pasete duro y para darle más emoción chorreaba algo de agua en la pared derecha, que no te daba la confianza para poner bien los pies… así que tras varios titubeos Piña llego al primer clavo y con su técnica depurada de artifo, fue sacando bien los pasos, hasta los últimos metros donde para salir de la chimenea tuvo que meter un friend y un empotrador adicionales. Había que empotrarse bien y resbalaba que daba gusto, como comentó Piña... "he sentido más adherencia en una fiesta de la espuma". Se salía un pelin a izda con algún pie bueno y después teníamos que hacer otra travesía con patiazo a la derecha. He de decir que tenía buenos cantos y se hacía bien. 

Desde la R4, Piña metido en la chimenea

Este largo me sorprendió un poco, esperando que fuera algo más amable en A1, pero en Ordesa no se puede uno relajar…jeje. Además la chimenea con la mochila mía y la de Piña colgada del arnés se me hizo durilla… pero así es el juego.

 

L6. 6a+. Aprox 30m

Llegaba el largo más duro según el croquis para hacer en libre… o colgándonos y trincando todo lo que pudiéramos, como lo hice yo… jeje. 

Moñeando en la R5 antes de empezar el L6

 Le dio Nacho y lo saco muy bien, fue sacando los pasos, descansando en algún clavo o cordino para no petarse.

El largo va con tendencia a la izda y es ligeramente desplomado hasta superar un cordino blanco en una esquina que se ve bien desde la reu. Se van cogiendo buenos cantos y tiene bastantes clavos y cordinos (ptes de roca), pero el desplome hace que vayan cargándose los brazos… yo fui en modo “amarrategui” y me colgué varias veces. Una vez pasado el cordino mencionado había un murete vertical donde Nacho protegió con un tótem azul y después de un clavo casi encima, chapo otros dos clavos hasta llegar a la reu colgada en un gran pedrusco, algo incomoda para los tres.

Yo lo escalé bastante mal, colgándome y agarrándome demasiado, por no leer bien los pasos. Me pareció bastante duro y algo más del 6a+, pero como dice Luichy"poner el grado que queráis que os va a costar lo mismo".

Además, se me desabrochó la magnesera y no me dio tiempo a cogerla, volando al vacío y comprobando que no tocó nada de roca en su caída hasta el suelo… ¡¡AMBIENTAZO!!

Posteriormente también comprobamos que el Tótem azul había corrido la misma suerte que mi magnesera.

 

con los pies colgando en la R6
 

L7. V+. Aprox 50m.

Gran largo, me toco a mí de primero y después de un inicio algo titubeante por las malas sensaciones que me había dejado el largo anterior, fui sacando bien los pasos, leyendo la vía, protegiendo y escalando bien, llegando a la reu con gran satisfacción y pensando en la extraña sensación, que escalando de primero, escalo mejor que de segundo.

El largo era muy bueno sucesión de diedros y placas verticales que te iban poniendo al punto, con gran ambiente y el final también con travesía a derecha, donde había una reu con 2 bolts pero colgada y me fui un pelín más a derecha donde estaba la reu original con 3 clavos y en una repisa cómoda, que agradecí después de la anterior medio colgada.

Nacho subió con dudas y me dijo que le había dado algún calambre en un brazo y le tocaba el siguiente largo. Yo como siempre trate de animarle y le dije que comiera y bebiera por si era algo de deshidratación.

Descansamos un poco, pero cogió los cacharros dispuesto para escalar el siguiente largo.

 

L8. V+/6a. Aprox 40m

Como decía salio Nacho, con un inicio en diedro por la derecha para volver enseguida a izda por encima de la reu. Al poco de empezar le volvieron los calambres y nos asaltaron las dudas sobre su estado y si podría acabar la vía. Le dije que fuera conservador, colgándose a la mínima y así fue subiendo. Poco más arriba encaró un diedro recto, que según croquis había que hacer una travesía aérea a la derecha para coger el diedro del fondo de la pared, pero Nacho siguió recto y después de este diedro, monto reu en un nicho con unos cordinos de ptes de roca y clavos. Así que parece que esta variante también es bastante usada y visto desde el lateral, el largo original tenía pinta de durillo.

Llegue a la reu y Nacho estaba en crisis mental… voy a dejar la escalada, he entrenado y me vuelven a dar calambres, tendré alguna enfermedad degenerativa… lo veía todo negro pero le anime lo máximo posible y le quite hierro al asunto, intentando hacerle ver que la vía en la que estábamos era bastante dura y quizás solo tenía que tomarse un pequeño descanso y comer y beber algo más, además viendo el croquis, “solo” nos quedaba enlazar con la vía y ya coger los dos últimos largos de chimenea, teóricamente más fáciles con lo que era relativamente optimista de que acabaríamos la vía.

 

L9. V con un paso de V+(volver a la vía). Aprox 50 m

Con estas y con las dudas de cómo hacer la travesía para volver a la vía, tomé las riendas y fuí de primero. Salí del nicho de la reu y pase con una zancada por encima para hacer la trave. Varios pasitos finos y vi la reu original y encima dos bolts colgados, imagino que para rescates. Examine las posibilidades de cómo pasarme a lo que se intuía que empezaba a ser la chimenea final de los últimos largos de la vía. Tras un paso muy aéreo y cogiendo un bloque, me pase a la derecha en lo que yo mismo me dije… “vaya pasazo” , mas que difícil de “echarle morro” jeje.

Allí ya vi la chimenea evidente por donde discurría lo que quedaba la vía, y fui subiendo con algo de roce de la cuerda hasta llegar a la reu que marca el croquis, en dos clavos en una pequeña repisa. Todo este tramo, con pasos en X y algún empotre fue saliendo bien porque siempre había algún pie, alguna mano que te solventaba el paso en cuestión.

Vistas al valle metidos en la chimenea en la R9

 

L10. V. (¿V?). Aprox 45 m.

 

Llegarón la pareja y parecía que Nacho aguantaba. Quedaba el último largo y Piña dijo que si eso le daba él. Vimos la hora y eran las 19 y poco, con lo que con algo de rapidez lo mismo llegábamos al último bus. Así que tire yo porque en principio iría algo más rápido… pero ¡Oh! Sorpresa! Este último largo me esperaba que fuera fácil o al menos como el anterior, pero la entrada ya me puso en alerta. No vi como salirme a izda, según decía el croquis y me comí el estrechamiento de la chimenea y con “estrecheces” subí este tramo. Después de un tramito fácil y mirada arriba, se intuía la chimenea más lisa que la anterior… "algo saldrá" pensé… o no. La cuestión es que por no quitarme la mochila y colgarla al arnés, pensando que saldría más o menos, pase alguna que otra miseria en el tramo más liso de la chimenea, que era de empotrarse en oposición si o si, haciéndolo algo más difícil… pero V quizás tampoco era… el caso que se me hizo un poco bola este tramo. Una vez superado, salí a zona fácil, algo herbosa con grandes bloques, intuyendo por fin el final de la vía. Salí a la horizontal y la alegría me vino a contrarrestar el cansancio acumulado. Monte reu con 2 friends y un pte de roca y ya les cante a ambos la llegada a… ¡¡¡ cima!!!.

 

Subieron despacio, hablándome por el walkie que estaban flipando con la dureza de este último largo. Llego Nacho a la cima y me dio unas gracias de verdad por tirar para arriba estando con sus dudas físicas… 

 

Recogiendo a Piña el último tramo, parece que lo meo...jeje.

llegó Piña y más abrazos emotivos y sinceros entre los tres. 

Abrazo de cima... lo mejor de la jornada

Que gran sensación, que gran vivencia, que gran alegría… que gran experiencia… estas emociones son inexplicables en palabras, hay que vivirlas… liberarse de pesadas mochilas mentales, superar los miedos, los nervios atenazantes ante un paso difícil y expuesto, bailar entre las rocas con el vacío mirándote a la cara por más que apartes la mirada... todo eso se siente cuando se holla una cumbre como esta.


Alegrías internas de cada uno por todo esto y alegría compartida.

Para mí escalar esta vía era cumplir un sueño… quizás al haber escalado el año pasado la Anglada-Cerda en Ordesa y sentir todo lo que era estar en la catedral de la escalada, ya tenía un convencimiento de que saldría bien, no sin esfuerzo claro.

Para Nacho quizás era volver después de esa primera vez que terminó muy mal físicamente, y esta vez más entrenado, aún teniendo problemas, pudo salir bien.

Para Piña, como siempre esta fuerte y no tuvo problemas físicos pero era el que peor venía a nivel mental, por no haber escalado mucho últimamente y sobre todo por estar algo dubitativo sobre sus posibilidades en este paredón, pero creo que se sacó una espina, aunque costo lo suyo… jeje.

Mire a un lado y a otro, mientras Nacho grababa y Piña disfruta del paisaje, yo estaba pensando todo esto que escribo a la vez que contemplaba este maravilloso entorno, con luz de atardecer y… recogiendo cuerdas, no puedo estar parado… jeje.

Mágico atardecer en Ordesa cuando hicimos cima

Eran las 20:20 y ya no llegábamos ni de coña al último bus de las 22:00, con lo que nos lo tomamos con calma. En esta época del año tenemos casi dos horas más de luz, y empezamos a bajar, el primer tramo con cuidado que un resbalón apareces en Torla, y después ya cogimos el camino de descenso normal del Tozal, que al poco coge el que baja desde la Faja de las Flores y se encamina a las clavijas de Salarons. Con cuidado y de día se bajan bien, un par de tramos con clavijas. Enseguida llegamos a la curva del camino donde nos salimos por la mañana, nos metimos a coger las mochilas y ya al volver nos quitamos todo el material y comimos algo, cuando empezó a hacerse de noche. Eran casi las 22 y bajamos por el bosque ya con el frontal encendido. Llegamos a la pradera a las 23 y algo, y esto que paso un coche… no hubo suerte iba a recoger a otros como nosotros que perdieron el bus… pero nosotros no teníamos ese enchufe… así que nos toco armarnos de paciencia, activar el modo “Joe Simpson”, “walking dead” o “piloto automático” y continuar a patita por el camino de Turieto bajo hasta Torla y echarle un par de horas más. 

A las 1:30 aprox llegamos al parking de Torla, miramos la nevera y … ¡¡premio!! ... las cerves habían aguantado frescas en la nevera… que rica… la primera ni la saboree, la segunda con un poco de comida ya si se disfruto.

 

Reponiendo fuerzas a las 2:00 de la mañana

Paliza de las buenas, machacada sin igual… pero que felices somos con tan poco. Salimos hacia una urba de Torla y tiramos el saco… cuando hinchaba la colchoneta creía que me dormía de pie… me tumbé y creo que 5 o 6 horas estuve inconsciente del cansancio acumulado durante la jornada.

 

Nos levantamos tranquilamente cuando nos empezó a dar el sol sobre las 9. Desayuno… que bien sabe todo cuando la jornada anterior ha sido como la que fue. Recogimos la leonera que teníamos en el coche, entre material y trastos y nos fuimos a Broto para echarnos un baño en el rio Ara… agua fresquita y reponedora, te deja los músculos dados la vuelta.

Nos bajamos a comer al camping de Fiscal, un chuletón como merecía la ocasión. 

Y para terminar resumir estos días en una frase del alpinista británico Roger Baxter-Jones : 

"Regresad vivos, regresad como amigos, haced cumbre... por ese orden".

Creo que conseguimos seguir esta regla.. y la experiencia vivida al escalar el Tozal con dos grandes amigos es de las mejores cosas que se pueden sentir. 


Pd: A ver si vuelvo a escribir más historias en el blog que lo tenía abandonado.