miércoles, 20 de agosto de 2014

Alpes. Sueños cumplidos... sueños por cumplir (I)





Alpes 8/14. Sueños cumplidos… sueños por cumplir.



Parte I. Sensaciones



Cuando nos juntamos después de atravesar el nevero, la poca energía que llevábamos la empleamos en abrazarnos fuertemente. Ese abrazo era el de gratitud al compañero, el del sufrimiento compartido y el de la alegría inmensa por atravesar el último obstáculo y poder decir… lo hemos conseguido!!!  

Hipnotizados...

Es el detalle que más recuerdo de todos estos días… clara muestra de la emoción que sentimos en esos momentos únicos e indescriptibles. Quizás era la sensación de satisfacción por el objetivo conseguido, quizás solamente por salir indemnes de una durísima escalada con todos sus ingredientes... desde luego no nos habíamos dejado ni uno en el tintero, todo lo mejor y lo peor, lo habíamos sufrido y disfrutado, como tantas otras veces, pero multiplicado por muchos factores. Que cansado estaba el cuerpo y que fresca se queda la mente al liberar todo esa tensión… es el contraste que genera la escalada.

Los compañeros de cordada... imprescindibles para cumplir los sueños
Por más párrafos como el anterior en el que intente expresar lo que significa esta actividad, no quedará reflejado en el papel y será necesario estar allí y vivir esta experiencia. Esta se inició en el mágico momento que ví una foto de la maravillosa y estética... Aguja Dibona. Al informarme de cómo se llamaba,  de que vías tenía, como de  vertical era, de cuanta historia tenía detrás, de quienes fueron los pioneros que se internaron en estos mares de roca… todo ello generó en mi mente un sueño por cumplir, que no era otro, sino escalar algún día por esta inmensa pared, navegar entre sus diedros, sus techos, sus famosos pasos... como pasar por el túnel del segundo largo, evitando algunos otros como la Fisura Madier, también sufriendo los igualmente celebres Cannelures Stoffer, o simplemente entregado al baile de la escalada en cualquiera de sus largos…. 

La Aguja Dibona... simplemente espectacular

Así, la culminación de este sueño, ha hecho sentirme alguien libre, alguien que ha podido tener la mente dispuesta a afrontar los retos, a superar los miedos, alguien dispuesto a apretar los dientes y tragar saliva para darte ese paso cuando los brazos ya van agotados y el ácido láctico se acumula en los músculos… en definitiva, sentirme vivo… y vivir sintiendo… y disfrutando… sobre todo disfrutando que es de lo que se trata.


3 comentarios:

  1. Aisss, se me ha puesto la piel de gallinita.... que buenos momentos que se recuerdan ya en la lejania.... como si hubieran sido realizados hace tiempo, cuando eramos unos aficionados de los buenos..... Gracias por esos días

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